miércoles, 7 de julio de 2010

ARF 2010: Anecdotario


En el capítulo de anécdotas, cabe destacar que Encar fue en una ocasión al servicio y de camino le entró el típico tipo descamisado de festival. Pasadísimo desde las 15:00, y que al cruzártelo sabes que acabará dormido en el césped cuando esté empezando a tocar su grupo favorito. El tipo le echó los tejos, a lo que Encar le respondió señalándose la barriga. El tío al principio no parece entender muy bien qué es lo que pasa, pero unos segundos después se da cuenta de que está embarazada, y decide huir de la escena, gesticulando como diciendo que él no tenía nada que ver con aquello. Nos reímos mogollón cuando nos lo contó la Encar.

El ambiente del festival sigue siendo uno de sus mayores valores.

Hay que ver lo bien que se está ahí, con toda esa gente que no busca problemas, que entienden de música en su mayoría y la aman, y que además son simpáticos, por regla general. Este año había muchísimos niños maquillados como Kiss, además de verdaderos freaks de la banda con curradísimos trajes. Era realmente entretenido ver todo aquel movimiento.

Especial recuerdo para un grupo de impersonators de Kiss, que accedían con alegría y paciencia a fotografiarse con todos los que lo solicitaran. Nosotros no fuimos menos!!! Lo que me pude reir con estos locos sin complejos que sabían cómo pasárselo bien.

La organización no ha dudado en repetir la experiencia de los conciertos diurnos en la Plaza de la Virgen Blanca, donde nos amontonamos los menos resacosos y, mientras tomas un aperitivo, seguimos disfrutando de la música.

Grande Élvez cuando pidió permiso para utilizar el aseo desde ese escenario a los vecinos que se asomaban para verle actuar.

Y la ciudad. Sigue siendo una ciudad extremadamente encantadora y cómoda de pasear. En esta ocasión, exploramos zonas que no conocíamos, y resultó muy agradable pasear por sus calles. Y qué gente más maja, oiga. Desde los del Hostal Desiderio, donde nos tratan como si fuéramos familia, después de tantos años, hasta el camarero de cualquier bar o el taxista de turno.

Solo tengo palabras de agradecimiento para esa ciudad y sus gentes.

Es difícil que podamos ir el año que viene, pero seguro que volveremos pronto.

Eskerrik asko, Gasteiz!!

1 comentario:

  1. Firmo palabra por palabra lo que dices. Ese festival en cualquier otra ciudad sería muy diferente.Y el 90% del público está allí por la música. Cosa muy, muy, díficil en cualquier otro festival. Abrazos.

    ResponderEliminar